Cada fin de año el Instituto Pantone, una empresa reconocida mundialmente que se dedica a la identificación y comunicación de los colores, establece su tono recomendado para este 2020. Las tendencias, los acontecimientos globales y hasta el estado de ánimo general influyen para su determinación.

La propuesta 2020: el Classic Blue. “Una opción que transmite calma, confianza y conexión, para afrontar una etapa llena de incertidumbres y crisis medioambientales, sociales y económicas. Es reconfortante y a la vez, describe el abismo, como el mar. Es la tristeza y también el color de los sueños, pero sobre todo es el reflejo de los jóvenes”, explicó Leatrice Eiseman, directora ejecutiva del Instituto de Color Pantone.

Siguiendo este mismo mensaje, la asesora de imagen y colorimetría Carolina Aubele explica en su libro Potenciá tu imagen y estilo con los poderes del ¡Color!, de Editorial Aguilar, que se trata “del color de la fe, la paz, la honestidad. Su energía es sincera, reservada y pacífica. Para experimentar su espíritu, basta con contemplar el mar, un lago o un cielo diáfano”.

Verano azul
Para incorporarlo en la moda, uno de los requisitos es “buscar aquella versión que de acuerdo a su estridencia brinde la luminosidad adecuada para cada una”, completa Aubele.
Para cada tono de piel y pelo, existe lo que se llama una colorimetría o paleta personal. Una regla súper simplificada: “a quienes tengan tez oscura, le quedarán mejor las opciones intensas y en el caso de las pieles claras, también las más sutiles”, dice la asesora de imagen y estilo Valeria Parodi.

Looks con las combinaciones de azul
Saber con qué tonos queda destacado o realzado, permite multiplicar las posibilidades de una prenda y ampliar los looks. Estas son las opciones recomendadas por Parodi:

– Con otros neutros: Los dúos con blanco, beige, gris y negro tienen vía libre. En la última opción, es bueno pensar que se trata de dos variantes con poca luz, que juegan un papel similar y hasta compiten entre si. Además, dan una imagen muy formal. Para quitarle este matiz, se podrán optar por prendas de cortes más innovadores.

– A partir de los complementarios: Para eso, se busca la opción opuesta. Como, por ejemplo, el naranja y el rojo. El efecto es llamativo y no pasará inadvertido. En cambio, si se incorpora en los accesorios será más sutil.

– Mix análogos: Se denomina así a las opciones cercanas dentro del círculo cromático. En este caso, el verde daría una combinación armoniosa y sentadora. La variante más jugada: el azul eléctrico.

El maquillaje que acompaña
“Dejamos atrás el cálido living coral que marcó el 2019 y pasamos a un tono frío, clásico, elegante, sobrio que puede incorporarse muy fácilmente en el makeup. Sobre todo, para las mujeres argentinas que a veces nos cuesta sumar colores en el maquillaje”, opina la maquilladora Connie Moreno, especializada en maquillaje aerográfico y en gestión de negocios para maquilladores y peinadores.

Las posibilidades que sugiere Moreno:

– En sombreados: Una técnica de smokey en estos tonos, en lugar del clásico negro, favorece mucho a aquellas mujeres que tengan el cutis bien claro y el pelo oscuro.

– En delineados y máscaras de pestañas: Esta propuesta es fácil de incorporar y puede ser elegida por las más clásicas, para ir sumando de a poco ideas diferentes. El resultado: un look con un aire glam y con un toque diferente.

– En labiales: Una alternativa para las más osadas. Un dato para no pasar por alto: conviene chequear que los dientes tengan un tinte más bien blanco. De lo contrario, adquirirán un aspecto más amarillento. La dupla para estas alternativas serán “otros productos en tonos anaranjados o durazno”.

Además, para aprovechar sus efectos, conviene buscar la variante adecuada para cada una y que siga el propio estilo. “La función del maquillaje es siempre potenciar la propia belleza de la mujer. Por eso, es importante usar a favor los colores y no porque simplemente estén de moda”, finaliza Moreno.