Un equipo de investigadores de Rusia, Kazajistán y Brasil inventaron un material compuesto a partir de desechos industriales que revoluciona la construcción de carreteras.

Los científicos de la Universidad Federal del Lejano Oriente de Rusia (FEFU), la Universidad Tecnológica Federal de Paraná y de un prestigioso centro de Kazajistán publicaron un artículo en la revista Journal of Cleaner Production.

Según el informe, el nuevo material está compuesto por sedimentos arcillosos, escoria de metal y residuos de la producción de cal. Las propiedades del producto cumplen con los requisitos de los materiales de construcción de calidad superior.

Andréi Taskin, responsable del laboratorio de materiales secundarios de la Escuela de Ingeniería de FEFU, explicó que el uso del nuevo material compuesto en la capa base de la carretera es más rentable que el hormigón y la arena.

En los experimentos que duraron año y medio se usaron residuos de una planta metalúrgica de Kazajistán. Al mezclar todos los componentes se obtiene un gel que con el tiempo se solidifica.

El investigador ruso Vsevolod Mymrin, descubridor de la tecnología, que actualmente trabaja en la universidad brasileña, sostuvo que los metales pesados que se encuentran en el material compuesto forman nuevos componentes a nivel atómico por lo que dejan de ser un peligro para el medio ambiente.
El nuevo material compuesto, recalcó, es ecológicamente seguro y cumple las normas sanitarias más estrictas.

Mymrin explicó que el producto se puede usar también en la producción de ladrillos no cocidos y bloques para la construcción civil.

Los residuos de las plantas metalúrgicas se consideran unos de los mayores contaminantes del medio ambiente en el mundo entero. Esta industria genera anualmente alrededor de 400 millones de toneladas de desechos.